La Embajada estadounidense en Kabul anunció que ha prohibido el consumo de alcohol en el campamento donde viven los guardias del edificio, después de que una ONG entregase a la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, unas imágenes de algunos de ellos en posturas comprometedoras, desnudos y borrachos en la zona diplomática.
El embajador y otros responsables de la legación diplomática se reunieron para discutir la cuestión, y los guardias están siendo interrogados en el marco de una investigación, dijo la Embajada en un comunicado. También se están planteando suspender de empleo y sueldo y despedir a parte del personal.
En la carta que ha enviado a Clinton la organización Proyecto de Supervisión del Gobierno, ésta revela que los guardias de seguridad de la empresa ArmorGroup hacían fiestas en el campamento en las que se quitaban la ropa, bebían vodka y abusaban de ciudadanos afganos.
Además de denunciar la falta de personal y otras deficiencias en la Embajada, la ONG advierte de que esta situación genera problemas de seguridad. En su carta, compara el ambiente creado por los guardias con la historia de la película ‘El señor de las moscas’, basado en rituales de abuso y humillación.
Según algunos testigos consultados por la organización, algunos guardias orinaban encima de otras personas. En una ocasión, un supervisor en ropa interior que llevaba varias botellas de alcohol en las manos cogió de la cara a un afgano y usó palabras duras para humillarle, según la ONG.
La Embajada informó en su comunicado de que “tras enterarse de las acusaciones”, tomó una “serie de medidas inmediatas para garantizar la seguridad” y que el personal de la legación diplomática “está bien informado”.
“El alcohol está prohibido en el Campamento Sullivan. Los empleados de la embajada siguen entrevistando a los guardias (…) para evaluar le necesidad de posibles suspensiones y finalizaciones” de contratos, agregó.
ArmorGroup, filial de la empresa de Florida (EEUU) Wackenhut Services, tiene 450 guardias trabajando en la Embajada en virtud de un contrato de cinco años valorado en 189 millones de dólares que se amplió el pasado junio
Fuente: Reuters
