Esta IA es lo último: ¡puede leer la mente y convertir pensamientos en texto!
Todavía no estamos a la altura de la Inteligencia Artificial (IA) y ya se están haciendo advertencias sobre su peligrosidad. Ahora, y corroborando la necesidad de control, se ha creado una tecnología capaz de leer la mente y transformar los pensamientos en texto.
El frenesí de ChatGPT fue solo una parte de la montaña rusa que es la IA. Después de todo, ahora, un equipo de investigadores ha desarrollado un decodificador que traduce la actividad cerebral en un flujo continuo de texto.
Atención, aunque esto ya se ha hecho antes, a través de un implante cerebral, los investigadores aseguraron que es la primera vez que se logra sin ninguna intervención quirúrgica.
Alexander Huth, neurocientífico e investigador principal
A partir de una resonancia magnética funcional, el decodificador pudo reconstruir lo que los voluntarios estaban pensando con alta precisión.
Nos sorprendió que funcionara tan bien como lo hizo. He estado trabajando en esto durante 15 años... así que fue impactante y emocionante cuando finalmente funcionó.
Admitió, a The Guardian, Alexander Huth, neurocientífico y responsable de la investigación, explicando que el sistema funciona”a nivel de ideas, semántica, significado".
IA prometedora pero embrionaria
Este decodificador impulsado por IA podría promover nuevas soluciones para restaurar el habla a los pacientes que la han perdido debido, por ejemplo, a un accidente cerebrovascular. Para hacerlo posible algún día, los investigadores probaron la tecnología en tres voluntarios, poniéndolos bajo examen durante 16 horas. La asociación de la actividad cerebral con el significado se realizó mediante GPT-1.
Durante esas largas horas, los participantes escucharon podcasts, historias e incluso se les pidió que imaginaran que ellos mismos estaban contando una historia. Según el informe, en la mitad de los casos, el texto generado se aproximaba mucho al significado de las palabras originales; la IA pudo leer la mente con bastante precisión.
Además, después de que se les pidió a los voluntarios que miraran videos cortos y silenciosos, el decodificador alimentado por IA también pudo leer la actividad cerebral y describir con precisión parte del contenido.
Como estaba diseñada para ser utilizada por una sola persona, la tecnología necesitaba reconfigurarse para las pruebas en cada uno de los voluntarios, que tenían que estar muy concentrados, ya que cuando viajaban al azar, frustraban el sistema.
El coautor del estudio, Jerry Tang, prepara a un voluntario para la recopilación de datos cerebrales
Aunque el rendimiento fue sorprendentemente bueno, en opinión de los investigadores, en ocasiones el sistema "no sabía si era la primera o la tercera persona, si era hombre o mujer"... Por lo tanto, todavía hay aristas para ser arreglado.
Finalmente, a través de la voz del coautor Jerry Tang, los investigadores compartieron que intentaron asegurarse de que esta IA no se utilice para fines inapropiados:
Queremos asegurarnos de que las personas solo usen este tipo de tecnologías cuando lo deseen y cuando les ayude.
