Y porque hoy es viernes
Antonieta llega furiosa al bufete de abogados, ansiosa por hablar con el abogado. Ella entra, se sienta y dispara:
– Doctor, aquí está la cosa. No voy a seguir. Mi razón para venir aquí con tanta urgencia es esta: quiero separarme de Domingos Patinho …
El abogado, que ha trabajado con la familia durante años, intenta persuadirla de que no tome esa decisión.
– Pero, doña Antonieta … Lleva menos de 10 años casada. Las crisis son normales en las bodas.
– ¡Inútil, doctor, quiero el divorcio! Vine aquí para averiguar cuál es el procedimiento.
El abogado intenta convencerla una, dos, tres veces, pero no hay forma, quiere el divorcio.
– Está bien, doña Antonieta. Ya que realmente quieres esto, sigamos adelante. Es tu derecho. Pero, antes que nada, sin querer ser entrometido, ¿puedo saber por qué quieres el divorcio a toda costa?
Ella responde muy enojada:
– Es simple, doctor. ¡Domingos simplemente no durmió en casa la última noche!
– ¿Es cierto? ¿Pero dio alguna satisfacción?
– Sí. Dijo que se alejó porque pasó la noche con su hermano.
– ¡Ah entendí! ¿Y descubriste que era mentira?
Y Antonieta responde:
– ¡Por supuesto que fue mentira! Pasé la última noche con su hermano.