Un algoritmo para todos gobernar
El mercado de transferencias en el fútbol es, básicamente, el oeste: sin límites, porque los valores suben a galope; sin reglas, porque el Fair Play es contorneado descaradamente; y poca o ninguna transparencia, y aquí entran los fondos opacos y misteriosos, y los empresarios de la ocasión.
Y es de ahí que salen los valores pagados por Neymar por el PSG (222 millones), Mbappé también por el PSG (150 millones), y las comisiones increíbles como, por ejemplo, la de Mino Raiola, el agente de Pogba que recibió a la cabeza 50 millones del United en el acto de la firma de contrato.
Esta desregulación es mala y parece mal, y es por eso, dice el "El País", que la FIFA quiere intervenir en el mercado de una forma … científica. Según el diario español, el organismo que gestiona el fútbol internacional quiere combatir los excesos en un programa que no podía tener un nombre más claro: "Reforma de las transferencias". este grupo de trabajo está siendo liderada por un italiano, Rafaelle Poli, que va a presentar medidas concretas:
La primera: crear un algoritmo que diga cuál es el precio y el valor justos de un jugador, y aquí entran variables como el contrato (la duración, se entiende), la posición (ya se sabe que los avanzados valen más que las defensas), los resultados en el club y en la selección, la edad (que cuenta, a no ser en el caso de Ronaldo …), y las estadísticas (goles, asistencias, número de partidos, etc).
El siguiente paso será aplicar una tasa de lujo si los clubes compradores pagan más de lo que está en la etiqueta; es decir, si un jugador vale 50 y se compra por 100, los 50 serán gravados y parte significativa de ese importe se entrega al club formador – un modernización en el ya existente mecanismo de solidaridad.
Ahora, la parte curiosa: se han encontrado absurdos los valores de Neymar y de Mbappé, sepan que este algoritmo valoraba a Neymar en 210 millones, por lo que solamente 12 millones estarían más.
Por otro lado, la "Reforma de las transferencias" engloba una limitación en el número de préstamos y también una comisión exacta para los agentes – y que todos los detalles de un negocio se hacen públicos.