Trump sobre al-Assad: "¡Vamos a matarlos a todos! Entramos allá y acabamos con ellos"
El nuevo libro sobre la presidencia de Donald Trump lo retrata como "colérico" y propenso a tomar decisiones "por impulso". "Un idiota", le llamará el jefe de Gabinete.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quería matar al presidente de Siria el año pasado, después de que Bashar al-Assad ordenó un ataque con armas químicas contra civiles. "¡Vamos a matarlos a todos, vamos a eso! Entramos allá y acabamos con ellos", dijo. Sin embargo, el secretario de Defensa norteamericano, Jim Mattis, tras haber dicho al jefe de Estado que "íbamos a resolver esto", ignoró el pedido y desarrolló un plan para un ataque aéreo limitado, que no amenazaba al líder sirio directamente.
Este episodio y muchos otros – poco dignificantes para el ex magnate del inmobiliario – constan en "Fear: Trump in the White House" (Miedo: Trump en la Casa Blanca), libro del periodista Bob Woodward a ser lanzado el día 11, el diario "The Washington Post" divulgó fragmentos. "Es sólo otro mal libro", dijo, sin embargo, Trump al "Daily Caller".
La obra de Woodward -que con Carl Bernstein reveló el escándalo Watergate, que llevó a la dimisión en 1974 del presidente, el también republicano Richard Nixon- retrata otras acciones de asesores de Trump en que ignoran órdenes presidenciales para limitar lo que ven como comportamientos perjudiciales y peligrosos.
estudiante del quinto o sexto año
Trump es descrito como propenso a explosiones coléricas y tomas de decisiones por impulso, creando una imagen de caos que Woodward dice ser equivalente a un "golpe de Estado administrativo" ya un "colapso nervioso" del poder ejecutivo.
Según el libro, en otra situación que involucra a Mattis – sobre la permanencia de tropas norteamericanas en Corea del Sur -, éste habrá dicho a colaboradores cercanos que "Trump actuó como un estudiante del quinto o del sexto año".
Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Sarah Sanders, ya llegó a la conclusión de que "Fear …" es "nada más que historias inventadas, muchas de ellas por ex empleados resentidos, contadas para denigrar al presidente" .
Entre otras revelaciones figura una en la que el ex asesor económico Gary Cohn sacó una carta de la mesa de Trump que el presidente planeaba firmar y que retiraría a Estados Unidos de un acuerdo comercial con Corea del Sur.
Cohn, que intentó contener los impulsos proteccionistas del jefe de Estado, también pretendía remover un memorando similar en relación al Tratado de Libre Comercio con México y Canadá.
Otros asesores han insultado a Trump por la espalda. El jefe de gabinete, John Kelly, lo ha llamado "idiota" y dicho estar "en la ciudad de los locos". "Este es el peor trabajo que he tenido".
Kelly, en declaraciones divulgadas por la Casa Blanca, ya aseguró que la historia es una "total estupidez".
Además, Woodward refiere que Trump trata a algunos asesores mayores con desprecio. Por ejemplo, le dijo al secretario de Comercio, Wilbur Ross, que sus mejores días ya van y califica al secretario de Justicia, Jeff Sessions, de "deficiente mental".
"Una vergüenza", dice Trump
Según el libro, el presidente norteamericano se ha vuelto cada vez más paranoico en relación a la investigación sobre la supuesta interferencia rusa en las elecciones de 2016, que llevaron a Trump a la Casa Blanca. El desvarío es tal que sus colaboradores lo comparan a Nixon durante el Watergate.
Por su parte, John Dowd, ex abogado de Trump, habrá simulado una entrevista con el presidente para convencerlo de que cometer perjurio si estuviera de acuerdo con hablar con el fiscal especial Robert Mueller, que encabeza la investigación. "No testifico, eso es un mono mono de color naranja".
En Twitter, Trump dijo que "es una vergüenza que alguien pueda escribir un artículo o un libro con historias totalmente inventadas para proporcionar la imagen de una persona que es literalmente lo opuesto".