Rui Pinto y el Football Leaks
La extradición de Rui Pinto para Portugal fue confirmada el jueves por la decisión del Tribunal Supremo de Budapest (Hungría), contradiciendo así el recurso fue interpuesto por sus abogados de sentencia de primera instancia.
El ex presidente de la CIA, que huyó con miles y miles de documentos de la NSA y de varios otros elementos, varias plataformas tales como fugas suizos, y los otros abogados entienden que en Portugal, no son las condiciones para Rui Pinto que siga desarrollando su acción delator.
Pero, después de todo, lo que significa considerar a Rui Pinto un delator?
Rui Pinto accedió a la información inmensa y peligrosa para ciertas entidades, sobre actividades ilegales y criminales del mundo de los "negocios" del fútbol como la fuga al fisco, el blanqueamiento de capitales, el encubrimiento de una variedad inmensa de actos ilícitos que muy perjudicados a diversos países y asumió la actitud de denunciar de forma directa o indirecta todo esto, dirigiéndose a la comunicación social organizada, como el Consorcio EIC (European Investigative Collaborations) para que explora en el buen sentido todo este manantial de información, orando colaborando con la justicia de países más abiertos al tratamiento y uso de este tipo de información para prueba en juicio.
En el caso de Rui Pinto, si la justicia funciona, mucha gente del fútbol de varias partes del mundo, puede ser vista y juzgada, desde clubes, dirigentes, agentes de fútbol, empresarios, oficinas de abogados, jugadores, entrenadores, fondos como la DOYEN y otra.
Pero importa plantear otra cuestión: ¿cómo logró Rui Pinto acceder al conocimiento de esta documentación incómoda? Ciertamente utilizando sus conocimientos técnicos, en este caso, el dominio de software específico y la colaboración de varios otros socios dispuestos a la denuncia, ciertamente también con dominio técnico, lo que comúnmente se ha convenido llamar "piratas" de información incómoda.
¿Habrá sido todo practicado de forma perfectamente legal? A la vista de las leyes vigentes, evidentemente, no. Pero, en el análisis de esta cuestión, interesa ponderar lo siguiente.
En la vida real se demuestra que, en la mayor parte de estos casos, las instancias oficiales (las policías de investigación) no "penetran" en estas cuestiones o, al menos, tienen grandes dificultades de llegar, porque las propias sociedades en que estas policías se insertan están organizadas para no facilitar.
Pensemos en los "Panama Papers", en el caso Snowden y otros. Toda esta información / denuncia, hecha pública por los dichos "piratas" de la información / denunciadores, acabó por traer ventajas a la sociedad ya los ciudadanos -en algunos casos más que en otros, es cierto. Pero incluso en los casos en que poco se avanzó, trajo información sobre una realidad a tener en cuenta. "Actuar" con más cuidado en su detección.
Nunca estos documentos vendrían a la luz del día a su debido tiempo. Un día tal vez se conociera, cuando y si alguna vez por cualquier razón se "encontraran" los archivos, pero cuando mucho quedaría como un registro más en la historia, sin efectos prácticos concretos. Y la corrupción una vez más escapaba. Así, por poco que se avance, pues la justicia tiene su propia perversidad, siempre se genera algo de benéfico.
Una persona de estas no puede, por lo tanto, ser considerada como un criminal como algunos desean. ¿Y quiénes son esos algunos? Queda la interrogación. Una persona como el Rui Pinto tiene que ser visto antes como un denunciador de hechos incómodos e ilegales que, corriendo ciertos riesgos por decisión propia, presta un alto servicio a la comunidad. De otro modo, nunca estas actividades ilegales se desmontar. Y, en este caso, ya tenemos resultados muy concretos y positivos. En España, por ejemplo, hubo jugadores y entrenadores que ya tuvieron que entenderse con la justicia e indemnizar el fisco de la fuga a los impuestos.
En este momento, Rui Pinto está colaborando con la justicia francesa y ya entregó a la "Der Spiegel", del Consorcio EIC, millones de documentos que dieron origen a artículos y libros que estuvieron en la base de los procesos en España y en Francia la situación sigue rodando.
Que tendrá lugar la extradición de Rui Pinto para Portugal, la situación será compleja, admitiendo que con él la justicia húngara envía la documentación que le fue capturado en su apartamento en Budapest.
¿Es porque? La legislación portuguesa, por lo que he leído, es muy reacio a acoger este tipo de información como un crimen a prueba, por lo que hay el riesgo de un corte muy celoso de sus poderes han de destruirlo. Después, hay muchos intereses de clubes y de agentes del negocio del deporte en juego, por lo que la presión va a ser enorme para que se proceda en ese sentido. En tercer lugar, no hay experiencia en la justicia portuguesa para hacer frente a este caso, por lo que el proceso sería / se prolongue durante un tiempo sin fin.
Nada de esto sería beneficioso para la imagen de Portugal, o la justicia portuguesa que ya tiene muy mala nota, por no hablar de lo que muchos comentaristas dicen que la contribución a la creación de la "verdad" de fútbol.
En medio de este caos, después de haber sido el "John" Fugas de Fútbol (Rui Pinto) condenado a la extradición a Portugal, lo que se pide (a pesar de todas las dudas e incertidumbres planteadas acerca de la actuación de la justicia portuguesa) es que se le proporciona el condiciones para que puedan seguir desenrollar el ovillo de la información que ha accedido y los elegibles (la justicia portuguesa) ir removiendo las consecuencias necesarias, además – y esto es fundamental – para asegurar Rui Pinto su propia seguridad personal. Rui Pinto tiene mucha razón en temer por su seguridad, como ha repetido veces sin cuenta.
Por otro lado, admito que Rui Pinto no esté solo en este barco y si va mal su situación, o sea, si la información que se envía es objeto de destrucción, que los otros socios puedan llevar a buen puerto. Del mal, el menos.
Esta situación mafiosa del mundo del fútbol merece ser bien desenmascarada.
El autor escribe de acuerdo con la antigua ortografía.