¿Recoge que es ladrón o peligro real?
Si la presencia de un militante de la extrema derecha en un canal de televisión provoca tanto alarido, eso sólo puede tener dos razones: o el peligro es real y se vuelve urgente tomar medidas para frenar el extremismo o estamos una vez más ante la realización del objetivo proverbio: "¡Recoge que es ladrón!"
Para que quede bien claro, tengo el mayor desprecio y repulsa por las ideas y acciones de Manuel Machado, pero considero que no es la ida a una televisión que lo hace peligroso o, como dicen algunos, contribuye a "traer a la extrema derecha" Portugal.
Estos argumentos sólo sirven para desviar la atención del director: para el avance de la extrema derecha en Portugal, es que existan condiciones necesarias, que se creó, entre otras cosas, las políticas llevadas a cabo por los gobiernos que no responden a los problemas urgentes y reales de la población ; que se desacreditan a los ojos de los votantes con políticas demagógicas a fin únicamente de ganar elecciones; que dejan la corrupción asumir dimensiones nunca vistas, etc.
Los políticos, no sólo portugués, olvidar o pretender olvidar la historia, pero tiene la tendencia a repetir maldita. Analizan las razones que llevaron a la toma del poder por los comunistas en la URSS y los nazis en Alemania y sacan conclusiones serias, porque el plazo de acción de la vacuna contra estas pestes está llegando a su fin.
Comprendo la indignación de la organización SOS Racismo contra la presencia de Manuel Machado en la TVI, pues el crimen por el que fue juzgado fue claramente racista, pero me sorprende cuando esa y otras organizaciones no toman posición cuando actos de xenofobia vienen de la extrema izquierda.
Un ejemplo. Durante la Copa Mundial de Fútbol en Rusia, la SIC transmitió el programa "Ronaldo en el país de los Soviets", presentado por mí y por la periodista Irina Shev. El PCP, por la pena de Ángel Alves, miembro del Comité Central de esa fuerza política, manifestó su descontento con el contenido del programa ", lo que no constituyó sorpresa. Él escribió en el periódico Avante de 21 de junio de 2018, refiriéndose a los presentadores del programa: "El inefable José Milhazes y una periodista de origen ucraniano".
A primera vista, todo parece estar dentro de los conformes: el José Milhazes no goza de popularidad entre los comunistas y no se preocupa nada con eso. Pero preste atención a las palabras "periodista de origen ucraniano". Esta definición no es inocente, pues el dirigente comunista sabía el nombre de la periodista, pero no fue por casualidad que la caracterizó como de origen ucraniano. Esto es una insinuación venenosa: si el origen es ucraniano, entonces es de aquellos que no les gustan rusos, pues para el PCP sólo son buenos los que apoyan a Vladimir Putin y las patifas que éste viene realizando contra Ucrania.
¿No será éste un caso de xenofobia o de aza de odio contra determinado pueblo? El "periodista de origen ucraniano" es el portugués y tiene un nombre y un apellido.
A propósito, la Entidad Reguladora para la Comunicación Social (ERC) y el Sindicato de los Periodistas no reaccionaron entonces, pero no dejaron escapar la decisión de TVI.
Me pueden decir que son casos muy diferentes, incluso incomparables, pero quisiera subrayar que los grandes odios nacen de "pequeños odios", de ahí la intolerancia cero a este tipo de caracterizaciones.
También me sorprende el hecho de prestar tanta atención a la propaganda de la extrema derecha y pensar que la extrema izquierda pueda propagar las ideas tan hediondas como las nazis. Se ve, a modo de ejemplo, el blog Para la Historia del Socialismo, creado y mantenido por militantes del PCP. Allí podrán encontrar textos salidos de la pena de dictadores como Lenin o Stalin, o sobre los "hechos" del verdugo Lavrenti Beria.
El tiempo políticamente correcto y los dos pesos y dos medidas deben haber pasado, pero por lo menos en Portugal, continúa siendo de buen gusto. Las experiencias nazi, fascista y comunista ya mostraron lo que valen: falta de respeto total por los derechos y libertades de los ciudadanos, el racismo y la xenofobia, las guerras, el hambre, la destrucción. Los orígenes ideológicos hasta pueden ser muy diferentes, pero el modus operandi y los resultados son los mismos.
Se siente con la sensación que el "caso de Manuel Machado" se asemeja al viejo dicho: "¡Recoge que es ladrón!". Por detrás del ruido y la confusión creados por casos como este el PCP y el BE allí van desempeñando su obediente papel en la geringonza. Por ejemplo, critican el Presupuesto de Estado, pero votan en él. No ciertamente con políticas de las que se combate la aparición de la extrema derecha.