Policía y bomberos obligados a intervenir en la parte final de la fiesta del Sporting en Alvalade
La celebración de un título nunca tiene adecuadamente horas definidas, excepto en las ceremonias solemnes y Sporting no escapó a esta regla al final de la Copa de Portugal: después de que todos los jugadores han sido varios minutos en el tono Jamor después de recibir el trofeo, con familias y amigos, la idea pasaba por acelerar la salida del Estadio Nacional hacia Alvalade pero el habitual control anti-dopaje En este caso, por fin, todo, con Diaby a coger la partida del autobús mientras algunas decenas de adeptos (y motos, con o sin cámaras de televisión) todavía esperaban al equipo para un último saludo.
Fue por el público, las puertas siempre que el acceso o incluso el propio escenario, el grupo tenía muchos rasgos similares con el último logro de la Copa de Portugal en 2015, en comparación con el Sp. Braga, con los jugadores llamados a la etapa que era instalado en el centro del césped uno a uno por orden numérico hasta la entrada final del capitán, en este caso Bruno Fernandes, con el trofeo. Todavía así, hubo dos matices: la llamada de elementos más "invisibles" de la estructura técnica, como los analistas de datos o los conductores, y la "no llamada" del presidente o de cualquier dirigente del club o del fútbol.
¡La Copa es nuestra !!! ????????????#Hasta al fin #DiaDeSporting pic.twitter.com/SnlI9YhsRf
– Sporting de Lisboa (@Sporting_CP) May 25, 2019
En el momento en que Marcel Keizer empezaba a dejar al micrófono algunas palabras de agradecimiento a los adeptos, los focos de atención pasaron a la cima sur de Alvalade: la policía recurrió al bastón para evitar una invasión (pacífica) de campo por uno de los pasajes por encima del foso detrás de las balizas, algunos adeptos respondieron con el lanzamiento de sillas y fue necesaria la llamada del cuerpo de intervención para calmar los ánimos en aquella zona del estadio, creándose un claro sin adeptos en ese lugar después de ese último momento.
Poco después, cuando era Bruno Fernandes que estaba ya con el micrófono, también en la cima sur pero un poco al lado, se produjo un pequeño incendio rápidamente apagado por los bomberos que se encontraban en la zona del césped pero que, sin embargo, tuvieron que evitar una silla que fue lanzada hacia él. Al final de toda esta confusión, hubo una camilla que se dirigió al lugar por la parte lateral del césped y sacó a una adepta que le resultó herida.
En la circunstancia de palabras y capitán técnica había dejado sin embargo, Keiser volvió a desmoronarse en alabanza a sus jugadores y el apoyo de los aficionados al equipo, terminando en portugués con un "Gracias, felicitaciones!", Mientras que Bruno Fernandes volvió a hablar en la ambición de alcanzar niveles más altos de conquistas. "Como todos saben, este año ha sido muy difícil para nosotros y para ustedes. Conseguimos dos copas pero esto no os satisface. Usted quiere más y nosotros también queremos más. Hay que continuar en esta línea, cada vez más unidos, jugadores y adeptos. Sólo con esta unión y apoyo vamos a conseguir. No os pido más de lo que han hecho, os pido igual y vamos a intentar hacerlo mejor " dicho.
Terminamos la época en fiesta, juntos de los nuestros, en nuestra casa ????#Hasta al fin #DiaDeSporting # ATaçaÉNossa pic.twitter.com/zKjwqLaxEP
– Sporting de Lisboa (@Sporting_CP) May 26, 2019
Poco después, acababa la fiesta y los jugadores comenzaron a salir en sus coches, con decenas de adeptos en la zona de acceso al parque para otra mini fiesta en aquel lugar. También en este caso, no había esta diferencia en relación a 2015, cuando los aficionados terminaron haciendo una invasión pacífica en el terreno de juego al final de las celebraciones tras el triunfo en Portugal Copa.