Muriendo en la playa

Nos lo llevamos todo. No esperábamos morir en la playa.

Pasamos meses en casa: cantamos Zeca Afonso en la ventana; esperamos afuera del supermercado; nos llevamos a Bacalhau à Braz para garantizarle al señor Américo, que alimenta a la familia de seis con el restaurante de su vecindario. Soportamos la vida de nuestro cabello y lo llevaríamos rápidamente al peluquero, usando una máscara, para repetir en el pensamiento que Dios quiere que no encontrará a nadie en esta figura. Salimos de la casa cubiertos, irreconocibles, conscientes de los momentos en que la mano se acerca a la cara y la máscara se desliza por la nariz. Vimos la Avenida da Liberdade vacía a mediados de abril y la Alameda cubierta de «sentido común» entre sindicatos en mayo. Aprendimos a descifrar las palabras apagadas detrás de las máscaras sociales, y a fingir que los extraviados no se adhieren al visor. Hicimos las recetas enlatadas sugeridas por la DGS y guardamos los frijoles negros para las ensaladas de verano, y todo para llegar aquí y enfrentar lo que los ambientalistas han estado anunciando durante años: ya no estamos en forma en el mundo.

Desde aquí, desde donde estamos, con una toalla y zapatillas en la mano, esperando el sol, todos nos vemos iguales, mirando el mar, a lo lejos. No somos. La playa, para la clase media, será, cuando sea, a su vez.

Incrédulos, con los hombros caídos, los labios temblando de rabia, miramos con envidia reprimida, las tablas enceradas, descuidadas sobre los cuerpos vestidos de neopreno. Así nace el mal, subrepticiamente: el ojo codicia lo que quiere tener y ser, y está prohibido. En segundos, la tabla encerada susurra en la distancia, llévame contigo. La impotencia y la humillación generan odio. Ya no es solo el tablero, es el yate que pasa y las vacaciones en el eco-resort por doscientos euros por noche, con una playa reservada. Ya no son solo las vacaciones, son los que pueden tomarlas. La riqueza ya no es aspiracional: el tablero es robado. El yate está destruido. El patrocinio ha terminado y el marxismo se reescribe: donde se leen los medios de producción, se leen los medios del verano, la lucha entre la arena de los ricos y la arena de los pobres, en tiempos covidianos.

De hecho, con más o menos ingresos, despidos o miedo al desempleo, entre el teletrabajo, la cocina y los niños en línea, y a pesar de las diferencias, todos éramos iguales hasta llegar a la playa. Justo en la playa, de forma gratuita, un activo de salud, protección contra los inviernos. Años de debates sobre la importancia de la vitamina D para golpear ahora la cara del acrílico en la entrada, al mismo tiempo …

La prevención del contagio no depende de la separación por acrílicos con o sin vista al mar. Sin contraseñas ni parquímetros. La prevención viene con el conocimiento. Este es el que tenemos para garantizar que llegue a todos de la misma manera. Es necesario repetir incansablemente los mecanismos de propagación de la enfermedad y los de protección. Vaya donde está la gente: ¿cuántos miran el programa de la mañana, cuántos asisten a la conferencia diaria de DGS? Visite todas las plataformas disponibles, institucionales o no, desde los programas de la tarde hasta los blogs de los influencers, a través del telescopio y BB. Haz que escuchen los periodistas más creíbles y los comediantes más queridos. Los actores. Una de las mejores maneras de aprender es a través de modelos: somos miméticos, copiamos lo que vemos: en la infancia, los modelos son los que tenemos, padre, madre, maestro; cuanto más viejos elegimos aquellos con los que nos identificamos. Tener a Cristina Ferreira para aconsejar una alternativa a la playa, o el comportamiento adecuado en la playa, puede valer más que un cordón sanitario.

Tal vez podamos abrir las puertas, almacenar los acrílicos, los drones y las contraseñas. La información es más importante que la interdicción.

Manuel Rivas

Fernando Rivas. Compagino mis estudios superiores en ingeniería informática con colaboraciones en distintos medios digitales. Me encanta la el periodismo de investigación y disfruto elaborando contenidos de actualidad enfocados en mantener la atención del lector. Colabora con Noticias RTV de manera regular desde hace varios meses. Profesional incansable encargado de cubrir la actualidad social y de noticias del mundo. Si quieres seguirme este es mi... Perfil en Facebookhttps://www.facebook.com/manuel.rivasgonzalez.14 Email de contacto: fernando.rivas@noticiasrtv.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *