Militares son juzgados por sospecha de malversación de dinero de la base aérea de Maceda
Un juez de Instrucción Criminal de Aveiro decidió hoy procesar a los siete militares del Ejército del Aire sospechosos de haber participado en una trama de malversación de fondos de la gestión del Aeródromo de Maniobra nº 1 (AM1) de Ovar.
En la lectura de la decisión de instrucción, celebrada esta tarde en el Tribunal de Aveiro, el juez decidió pronunciar (procesar) a los siete acusados, entre ellos un ex comandante de la AM1 (actual Base Aérea nº 8).
Los restantes imputados son militares de diversos rangos que en el momento de los hechos estaban vinculados al Ejército del Aire portugués, incluidos oficiales y auxiliares operativos.
Sólo la esposa del ex comandante no fue procesada por el delito de usurpación de funciones que le había atribuido el Ministerio Público (MP).
El juez también abandonó algunos delitos de recepción indebida de ventaja y otros pasaron a ser abuso de poder, manteniendo los delitos de malversación, malversación y denegación de justicia y prevaricación.
La fase previa al juicio, una fase procesal opcional para evaluar si existen pruebas suficientes para llevar a juicio a todos los imputados y qué delitos serán perseguidos, fue solicitada por el excomandante y su esposa.
Los hechos delictivos se remontan al período comprendido entre octubre de 2018 y abril de 2021, cuando el principal imputado se desempeñaba como comandante de la AM1 en Ovar, en el distrito de Aveiro.
La acusación del diputado afirma que el coronel, actualmente jubilado, obtuvo prestaciones ilegítimas para él y su familia y recibió o proporcionó ventajas indebidas a otros militares y trabajadores civiles de la unidad, provocando un perjuicio al Estado de casi 200.000 euros.
Según la investigación, el acusado autorizó y justificó indebidamente ajustes en los inventarios del balance alimentario del comedor AM1, que correspondieron a una “desviación absoluta” de alrededor de 120 mil euros.
La acusación también señala que el ex comandante no comió en el comedor, habiendo dado instrucciones para que sus comidas fueran transportadas diariamente a su domicilio, así como las de su esposa y su hijo, quienes no tenían derecho a alimentos pagados por el Aire. Fuerza, lo que se tradujo en una ventaja patrimonial indebida de alrededor de 17 mil euros.
Durante el período en cuestión, el excomandante también recibió en su domicilio alimentos y distintos artículos que normalmente no se consumen en el comedor, entre ellos vino de la marca “Papa Figos” y licores, distintas frutas como papaya y mango, tortas, chocolates. , zumos, agua con gas, quesos, mantequilla, salsas, condimentos y verduras, por un valor de casi 14 mil euros.
El oficial también solicitó y recibió lechones en las fiestas de Navidad de 2019 y 2020 y en la fiesta de cumpleaños de uno de sus hijos, habiendo además proporcionado trabajo adicional a los trabajadores del comedor civil en actividades personales y fiestas, cuyo costo corrió a cargo de AM1.
El MP solicitó que se condene a los imputados a pagar al Estado alrededor de 238 mil euros, correspondientes al daño causado, y también ordenó la extracción de un certificado para enviarlo al Tribunal de Cuentas para una posible determinación de responsabilidad financiera.
Según información de la Fuerza Aérea, los oficiales imputados en este caso no se encuentran actualmente en servicio activo en esa rama de las fuerzas armadas.