Más de 100 personas detenidas en Londres tras los enfrentamientos del sábado
Más de 100 personas fueron arrestadas después de los enfrentamientos del sábado en Londres entre la policía y los manifestantes, incluidos algunos en la extrema derecha, que afirmaron querer proteger las estatuas, dijo la policía hoy.
Los manifestantes estuvieron involucrados en enfrentamientos con la policía británica en el parlamento de Londres durante manifestaciones contra el racismo, dijeron funcionarios.
Los agentes de policía fueron atacados con botellas, latas y otros objetos punzantes en un día marcado por la violencia en el área gubernamental de esta capital, donde se encuentra el Parlamento, durante una manifestación antirracista.
Según la Policía Metropolitana de Londres (Met), los detenidos fueron apresurados por agredir a agentes, por actos de violencia, posesión de drogas y embriaguez.
Quince personas, incluidos dos policías, resultaron heridas y seis fueron hospitalizadas, según el Servicio de Ambulancia, que no proporcionó más detalles sobre su condición.
Activistas de extrema derecha, muchos de los cuales estaban borrachos, que lucharon con la policía, se reunieron en Londres para defender las estatuas de figuras históricas británicas después de los actos de vandalismo del fin de semana pasado.
Con los brazos en alto y gritando «Inglaterra», activistas de extrema derecha arrojaron botellas, latas y patearon a los agentes, mientras la Policía Metropolitana de Londres investiga a un hombre que orinó en una placa dedicada al policía Keith Palmer, quien murió en el ataque. ataque terrorista en el Parlamento de Westminster.
Además de estos incidentes, hubo manifestaciones pacíficas en Hyde Park, Londres y otras ciudades británicas, incluidas Belfast y Brighton, por grupos que intentaron exponer el racismo a raíz del asesinato del afroamericano George Floyd, asfixiado bajo escolta policial en Minnesota, en Estados Unidos, el 25.
Además de Londres, las manifestaciones tuvieron lugar en varias otras ciudades del Reino Unido, como Belfast, en Irlanda del Norte, y Brighton, en el sur de Inglaterra, aunque hasta ahora no se han reportado actos de violencia, según informes de las autoridades británicas. .
El primer ministro británico, Boris Johnson, escribió en Twitter que «el vandalismo racista no tiene lugar» en las calles y que quien ataque a la policía tendrá todo el peso de la ley.