Hungría demanda a la televisión por mostrar a familias homosexuales en un comercial
El grupo de medios RTL Hungría está siendo demandado por el gobierno de extrema derecha del primer ministro Viktor Orbán por publicar un anuncio contra la homofobia. La acción fue lanzada por la Autoridad Nacional de Medios e Infocomunicaciones (NMHH), bajo la justificación de que la obra no es apta para niños.
El anuncio, que ha estado al aire desde diciembre, reproduce las críticas a las familias LGBT, llamadas familias arcoíris, hechas en las redes sociales y muestra las reacciones y respuestas de padres y madres homosexuales, maestros y un sociólogo de la Academia de Ciencias de Hungría.
La Ley de Medios de comunicación de Hungría, uno de los primeros textos promulgados tras la llegada al poder de Orbán en 2010, establece que los canales de radiodifusión tienen entre sus objetivos «promover el respeto por la institución del matrimonio y el valor de la familia».
En mayo del año pasado, el país prohibió a las personas trans cambiar sus nombres en los documentos y en noviembre enmendó la constitución para restringir la definición de madre y padre a mujeres y hombres heterosexuales, limitando la adopción por parejas no tradicionales.
Bajo el título «La familia es la familia», el anuncio objeto de la demanda fue realizado por una asociación para la defensa de los derechos LGBT, la Sociedad Háttér. El NMHH también multó a Coca-Cola en 2019 por la campaña “Amor é amor”, que incluía parejas homosexuales.
Según el gobierno, las fotos de besos entre mujeres y abrazos entre hombres en comerciales de gaseosas podrían «obstaculizar el desarrollo físico, mental, emocional y moral de niños y adolescentes».
En diciembre del año pasado, el gobierno húngaro obligó a circular un libro de cuentos de hadas para niños con la advertencia de que «exhibe patrones de comportamiento que difieren de los roles de género tradicionales», ya que incluye personajes LGBT y «no blancos».
Sin la advertencia, dijeron las autoridades, «los consumidores pueden decidir comprar el libro basándose en información engañosa y encontrar, sin saberlo, contenido que va más allá del contenido habitual en los cuentos de hadas».
La obra, según el editor, trata de la dificultad de algunas personas para encontrar su lugar en el mundo. En uno de los cuentos, un príncipe se casa con otro, y las ilustraciones muestran parejas de diferentes etnias, gitanos y personas con discapacidad.
Las declaraciones en entrevistas también han dado lugar a castigos: en una, un canal de televisión fue multado por transmitir la declaración de un político de la oposición de que «solo quedaría ese horrible grupo de hombres blancos, cristianos y heterosexuales» si los inmigrantes y otras personas perseguidas en Hungría fueran expulsados del país .
Las organizaciones de derechos LGBT dicen que el gobierno de Orbán ha intensificado las acciones contra los homosexuales porque sus ataques a los inmigrantes no han sido suficientes para mantener alta su popularidad. Hungría se encuentra entre los países investigados por la Unión Europea por violaciones del estado de derecho, incluida la persecución de minorías y la interferencia de los medios de comunicación.
Los estudios realizados en 2019 indicaron que los vehículos pro-Orbán ya representaban el 77,8% del segmento de noticias y relaciones públicas del mercado de medios húngaro y, el mes pasado, la última gran radio independiente del país, Klub, fue cancelada.
El concepto de familia del gobierno húngaro también irritó a las mujeres cuando, en un vídeo titulado «Cómo puede triunfar una mujer», la ministra de Asuntos de la Familia, Katalin Novak, declaró que «las mujeres no deben competir con los hombres por puestos o salarios iguales».
En un país donde las trabajadoras ganan alrededor de un 15% menos que sus homólogos masculinos (según datos de 2019), la ministra, que tiene entre sus objetivos elevar las tasas de matrimonio y natalidad en Hungría, dice que la idea de que es necesario elegir entre tener muchos hijos y realizarte profesionalmente.
