Google Cloud defendió el mayor ataque DDoS de la historia superando fácilmente el récord anterior
Los ataques DDoS tienen un único propósito bien identificado por quienes los llevan a cabo. De forma distribuida y bien organizada, inundan los servicios objetivo y buscan deshabilitar su presencia en Internet.
Estos han sido cada vez más frecuentes y con dimensiones nunca antes vistas, siendo muchas veces difíciles de combatir. Google ha revelado ahora que su servicio en la nube pudo defender a un cliente del mayor ataque registrado, superando claramente el récord anterior.
La defensa contra un ataque DDoS no es simple ni directa. Estos utilizan máquinas y dispositivos dispersos en Internet para centrar sus solicitudes en un servicio, provocando que se inunden y dejen de funcionar o de ser accesibles para los usuarios.
Google Cloud está ahora en el centro de estas defensas, como anunció recientemente. Lo revelado mostró que este servicio en la nube logró prevenir un ataque y mantener accesible el servicio de uno de sus clientes, quien fue víctima del mayor ataque registrado.
La información de Google señala que su plataforma fue capaz de manejar 46 millones de solicitudes por segundo. Esta cifra es un 76% superior al récord anterior, registrado en junio de este año por Cloudflare. En ese momento, se registraron 26 millones de registros por segundo.
Para escalar este ataque DDoS, esta cantidad de solicitudes es equivalente a todas las que recibe Wikipedia en un solo día. La gran diferencia es que llegaron a los servicios de Google Cloud en solo 10 segundos y no en un período de 24 horas.
Por lo que se ha revelado, el ataque DDoS comenzó en la madrugada del 1 de junio, con 10.000 solicitudes por segundo. Creció después de 8 minutos a 100.000 pedidos y alcanzó su punto máximo 2 minutos después. Duró 69 minutos en total y habrá parado porque no tuvo la repercusión deseada.
La rápida respuesta de Google, con su Cloud Armor, pudo detener el ataque y mantener el servicio de sus clientes funcionando sin problemas. La detección temprana de esta situación fue la garantía de que el impacto fuera mínimo, aún con el volumen que tuvo este ataque DDoS.