El incendio que destruyó el Museo Nacional de Brasil comenzó en el aire acondicionado
La Policía Federal anunció este jueves que el incendio que destruyó el Museo Nacional de Brasil en Río de Janeiro en septiembre del año pasado, comenzó en un aparato de aire acondicionado situado en el auditorio en la planta baja del edificio.
La conclusión forma parte de un informe sobre el incendio, en el que expertos constataron también la existencia de fallas en el sistema de prevención de incendios en el museo.
Según los expertos, el sistema de control de los detectores de humo no estaba accionado, no había puertas cortafuegos y el sistema interno de cámaras de seguridad era ineficiente.
El informe fue formulado a partir del trabajo de nueve expertos de la Policía Federal de diferentes estados y de agentes que participaron en la investigación.
El Museo Nacional de Río de Janeiro perdió prácticamente todo su patrimonio histórico, científico y cultural tras el incendio.
Fundada por el rey Juan VI de Portugal, fue el espacio del museo más antiguo y uno de los más importantes de Brasil.
Entre las piezas del acervo estaban la colección egipcia, que comenzó a ser adquirida por el emperador Pedro I, y el más antiguo fósil humano encontrado en el país, bautizado "Luzia", con cerca de 11.000 años.
Entre los millones de piezas que representan los 200 años de la historia de Brasil eran también un diario de la emperatriz Leopoldina, y un trono del Reino de Dahomey, dada en 1811 a la portuguesa príncipe regente Juan VI.