El futuro presidente participa en el culto evangélico en el primer acto público
El futuro presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, participó el martes por la noche en una celebración evangélica en su primer acto público tras las elecciones del domingo.
En la celebración, realizada en la ciudad brasileña de Río de Janeiro en la noche del martes, Bolsonaro afirmó que "no era el candidato más preparado" para ocupar la Presidencia del país, pero agregó que "Dios prepara a los escogidos".
"También quiero agradecer a Dios por esta misión, porque Brasil está en una situación un tanto complicada, con una crisis ética, moral y económica, estoy seguro de que no soy el más capaz, pero Dios capacita a los elegidos", afirmó, en la sede de la iglesia asamblea de Dios Victoria en Cristo.
El próximo Presidente de Brasil, del Partido Social-Liberal, habló al lado de Silas Malafaia, uno de los pastores evangélicos más influyentes y conservadores del país.
Ante los cientos de personas, Bolsonaro pidió a los fieles de la Asamblea de Dios Victoria en Cristo rezar por su éxito al frente de la Presidencia, puesto que asumirá el próximo 1 de enero.
Representante de la corriente de la extrema derecha que ganó aliento en 2018, Bolsonaro conquistó durante su campaña el apoyo masivo de los votantes evangélicos, que crecieron exponencialmente en Brasil en los últimos años.
Aunque se declare católico, Bolsonaro viajó a Israel en 2013 para ser bautizado en el río Jordán, lugar que tiene gran simbolismo para los evangélicos brasileños.
Antes de participar en el culto, Bolsonaro realizó una serie de reuniones de trabajo para elegir un equipo y la agenda de transición de Gobierno.
Bolsonaro ganó la segunda vuelta de las presidenciales brasileñas el pasado domingo, con el 55,1% de los votos, frente al 44,9% de su adversario Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT).