EE.UU. levanta sanciones al sobrino de Maduro, alienta el diálogo con la oposición
Estados Unidos levantó las sanciones contra un sobrino de la esposa del dictador venezolano Nicolás Maduro, anunció el viernes el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. El anuncio se produce semanas después de que Washington dijera que había aliviado las sanciones y tomado medidas para alentar el diálogo entre el gobierno venezolano y la oposición.
Carlos Erik Malpica Flores había sido incluido en la lista de sanciones de EE.UU. en 2017 por presuntos vínculos con actos de corrupción. Según la prensa venezolana, tiene 49 años y ha ocupado tres de los cargos más importantes de la función pública venezolana: tesorero nacional, director financiero de la estatal petrolera PDVSA y director del Banco de Desarrollo de Venezuela. También trabajó en el Ministerio de Relaciones Exteriores, en el Parlamento y en la secretaría de la Presidencia.
En mayo, la administración del presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que la oposición venezolana, que Washington considera un gobierno interino, había pedido una serie de medidas para allanar el camino al diálogo con Maduro. Además de levantar la sanción contra Flores, la Casa Blanca autorizó a Chevron, la única petrolera estadounidense que aún tiene activos en Venezuela, a negociar con PDVSA.
La semana pasada, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, dijo que creía que pronto se reanudarían las negociaciones entre el gobierno y la oposición, encabezada por Juan Guaidó, en la Ciudad de México. El año pasado, la oposición y el régimen de Maduro iniciaron un intento de diálogo en la capital mexicana, pero el dictador suspendió las negociaciones en octubre en represalia por la extradición desde Cabo Verde a Estados Unidos de Alex Saab, un empresario considerado su testaferro.
Este viernes (17), Gerardo Blyde, de Plataforma Unitaria, el grupo político de Guaidó, escribió en las redes sociales que la alianza «trabajó muy de cerca con Estados Unidos en acciones específicas destinadas a reactivar el proceso de negociación (…) en busca de soluciones ante la grave crisis que afecta al pueblo venezolano».
Estados Unidos reconoce a Guaidó como presidente interino de Venezuela tras las elecciones de 2018, que considera fraudulentas, aunque en la práctica el poder en el país lo ejerce el dictador chavista.
Ese año, luego de las elecciones, el expresidente republicano Donald Trump lanzó una campaña de cabildeo para sacar a Maduro del poder. Pero Maduro sobrevivió, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, así como de Rusia, China y Cuba. Por ello, algunos legisladores del ala izquierda del Partido Demócrata piden a Estados Unidos que retome el diálogo con el venezolano, pero aún hay reticencia entre otros demócratas y republicanos más conservadores.