Cáncer colorrectal: cómo garantizar la calidad de vida de los operados
El mes de marzo está marcado por el color azul marino con motivo de la campaña de sensibilización sobre el cáncer colonrectalcaracterizado por tumores que se inician en el intestino grueso -también conocido como colon- y en el recto, la parte final del intestino, que precede al ano.
Además de hablar de diagnóstico precoz y prevención, es necesaria una mirada humanizada a los pacientes que son tratados por este tumor.
Comprender el cáncer colorrectal
La enfermedad surge, en la mayoría de los casos, de póliposlesiones benignas que crecen en la pared del intestino grueso.
Puede desarrollarse de manera silenciosa hasta causar síntomas, como cambios en los hábitos intestinales (diarrea o estreñimiento), sangrado en las heces, dolor abdominal y ganas urgentes de defecar.
A día de hoy, según datos del Instituto Nacional del Cáncer (INCA), se producen unos 41.000 nuevos casos de este tumor al año, y puede ser una de las causas de mortalidad prematura para 2030.
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formas de prevención
Como es el segundo cáncer más común entre hombres y mujeres en Brasil, mucho se habla sobre la importancia de adoptar hábitos más saludablesque conducen a la reducción de los factores de riesgo de la enfermedad.
Esto es lo que llamamos prevención primaria. Incluye: aumento de fibras solubles (procedentes principalmente de cereales y frutas) en la dieta, disminución de la ingesta de grasas de origen animal, cese del tabaquismo, práctica regular de ejercicio físico y reducción de la obesidad.
¿Es el diagnóstico precoz la forma de cambiar este panorama?
Sí. Cuando hablamos de este tumor, sabemos que, en la mayoría de los casos, es tratable, con buenas posibilidades de curación cuando se detecta a tiempo y no se extiende a otros órganos o tejidos.
Identificar las lesiones antes de que puedan causar síntomas puede ser crucial para tratar la enfermedad antes de que progrese.
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Cómo detectar el cáncer colorrectal
La detección del cáncer colorrectal se basa, en un principio, en la detección de sangre oculta en las heces. Si es positivo, indique el colonoscopia.
Este camino es importante para reducir efectivamente la incidencia y frecuencia de los casos más avanzados, reduciendo también la mortalidad.
En el Instituto del Cáncer del Estado de São Paulo (Icesp), el cáncer colorrectal representa el 24% de los casos registrados, con el registro de, en promedio, cerca de 800 pacientes tratados por año.
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El papel de la cirugía en el tratamiento.
La cirugía acaba siendo la parte inicial del tratamiento, en la que se extirpa la zona afectada del intestino y los ganglios linfáticos.
Además de la intervención quirúrgica, se utilizan otros pasos, como la radioterapia asociada (o no) a la quimioterapia, para facilitar la extirpación de dichos ganglios o reducir la posibilidad de reaparición del tumor.
La relación entre el cáncer colorrectal y la colostomía
Hablar de cáncer colorrectal es fundamental para disipar algunos mitos y aportar información relevante sobre diagnóstico precoz, prevención, tratamiento y calidad de vida.
Esa es la bandera levantada por la campaña Marcha Azul Marinho, que refuerza, a través de acciones realizadas por organismos oficiales de salud y entidades médicas, la necesidad de hablar sobre el tema.
Un ejemplo de acción es la rueda de conversación que será promovida por el ICESP-HCFMUSP el 27 de marzo en el Museo de Arte Contemporáneo de la USP (MAC USP), en São Paulo, para abordar la calidad de vida de los pacientes ostomizados durante el tratamiento.
Es solo que, después de la cirugía, a veces es necesario usar una bolsa de ostomía temporal o permanente, lo que requiere algunos ajustes en el estilo de vida.
ÍNDICE DE ENFERMEDADES
Centrarse en el paciente ostomizado
El objetivo de la iniciativa es traer una nueva mirada al paciente ostomizado, pues, según estudios, cerca del 48% de los que se someten a una intervención quirúrgica consideran malo vivir con la bolsa de ostomía, precisamente por los cambios que provoca en su rutina. .
Ante los cambios y dudas que surgen sobre posibles limitaciones, la orientación multidisciplinar es fundamental para remediar los interrogantes.
Más que abordar el manejo de la bolsa de ostomía, es fundamental tener una atención más amplia en lo que respecta al apoyo en la educación en salud y el fomento del autocuidado, teniendo en cuenta cuestiones como la autoestima, la autoimagen y las relaciones sociales.
Más que sobrevivir durante el tratamiento del cáncer colorrectal, los pacientes necesitan ayuda para comprender que, incluso utilizando una bolsa de ostomía, es posible tener una buena calidad de vida, y esto no debe causar miedo. Al contrario: es crucial tener determinación en la lucha contra el cáncer.
Para retratar ese escenario, el Icesp-HCFMUSP creó en 2022 el proyecto “Sobre Viver”, una exposición fotográfica itinerante, que trae registros de pacientes ostomizados. La idea es demostrar que sí es posible hacer una vida normal con una bolsa de ostomía.
Después de todo, debemos tener esta mirada humanizada a las personas afectadas por este tumor.
*Ulises Ribeiro Jr. es profesor asociado de cirugía del aparato digestivo en la Facultad de Medicina de la Universidad de São Paulo y coordinador médico de oncología quirúrgica en ICESP-HCFMUSP
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