Apelaciones estadounidenses contra la decisión que impidió que WeChat fuera prohibido
La telenovela en la que los Estados Unidos de América y las aplicaciones y empresas chinas siguen siendo protagonistas todavía tiene muchos episodios por terminar. Recordamos que la administración de Donald Trump quería prohibir las aplicaciones TikTok y WeChat del país. Pero el servicio de mensajería logró obtener respaldo legal y, con ello, frenar la orden ejecutiva firmada por el presidente estadounidense.
Sin embargo, el Departamento de Justicia de la Casa Blanca ha anunciado ahora que apelará esta decisión. El objetivo es que WeChat se elimine permanentemente de AppStore y Google Play Store.
Donald Trump siempre ha tenido claro su objetivo con las aplicaciones chinas TikTok y WeChat. El presidente estadounidense emitió una orden ejecutiva para prohibir el funcionamiento de las dos plataformas del país.
Sin embargo, el día en que esta decisión, impuesta por el Departamento de Comercio de EE. UU., Se haría cumplir, la jueza de California Laurel Beeler levantó esa misma prohibición.
Esta decisión del juez se logró a través del respaldo legal obtenido por WeChat. Así que alivió a los aproximadamente 19 millones de usuarios norteamericanos de la aplicación.
Apelaciones de EE.UU. contra el fallo que prohíbe la prohibición de WeChat
Apenas unas semanas después, el Departamento de Justicia de la Casa Blanca anunció que apelará la decisión de la jueza Laurel Beeler. Según los abogados del gobierno, el objetivo es que la aplicación de mensajería se elimine de las tiendas AppStore y Google Play Store.
La decisión del juez es incorrecta porque permite el uso continuo y sin restricciones de WeChat, una aplicación que el ejecutivo ha determinado que representa una gran amenaza para la seguridad nacional de los Estados Unidos.
Los usuarios de WeChat dicen que EE. UU. No tiene pruebas contra la aplicación
En el otro lado de la historia hay una asociación creada por usuarios de WeChat. Argumenta que la administración de Donald Trump aún tiene que proporcionar evidencia relevante de que la aplicación sea de hecho una amenaza.
Como ellos dicen:
El gobierno no ha presentado ninguna prueba o documento que demuestre que existe un riesgo grave de seguridad. Sin eso, no hay forma de justificar una prohibición sin precedentes. Esto viola la primera enmienda a la constitución, algo que garantiza la libertad de expresión de los ciudadanos.
La asociación agregó que la empresa que creó WeChat, la empresa china Tencent, intentó colaborar con el gobierno de EE. UU. En un intento por resolver el problema. Sin embargo, parece que la administración de Donald Trump no quiere ninguna conversación con la marca china.